Pasaje a considerar:
“Pero vosotros,
amados, tened memoria de las palabras que antes fueron dichas por los apóstoles
de nuestro Señor Jesucristo.” (Judas 17)
Comentario:
La salvación no es una oferta, sino el regalo de Dios a los que fueron amados
desde la eternidad. Por tal razón, si los creyentes conocen el amor de Dios
para con ellos en Cristo, entenderán que cualquiera que le añada a la obra de Jesús
o le resta, no puede provenir de Dios. Existe una estrecha relación entre el
amor de Dios y su Palabra.
La manera correcta de no apartarnos de la verdad es conociéndola bien. Para
todo en la vida se necesita un punto o un marco de referencia; el de la iglesia
es la Palabra. Por consiguiente, debemos tener memoria de las palabras dichas
por los apóstoles de Jesucristo. La expresión memoria μνάομαι significa fijar en
la mente o captar mentalmente, recordar, tener presente, acordarse.
A continuación, algunos problemas comunes en las iglesias.
1-La poca memorización de la Palabra de Dios
2-La fascinación por lo novedoso y no por la Palabra de Dios
3-La poca comprensión de la Palabra de Dios
4-La falta de corroboración del mensaje contra la propia Palabra de
Dios
Como cristianos, es nuestra responsabilidad vivir de acuerdo a la
Palabra. ¿Si nuestros hermanos fueron llamados a mantenerse en la sana doctrina
sin tener una Biblia a la mano, qué excusa cree que tendrá para no leerla,
estudiarla y compartirla?
Conclusión:
La inspiración y la preservación de la palabra de Dios en la Biblia revela
su amor para con nosotros y su deseo de que vivamos de acuerdo a su voluntad. La
dedicación, el tiempo, la búsqueda por comprender la verdad, la intencionalidad
que practicamos al vivir de acuerdo a ella y el deseo por compartirla, evidencian
nuestro amor y pasión por Jesús.
Gilberto Rufat
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