miércoles, 21 de mayo de 2014

Mirándole, le amó - Marcos 10:21

 "Entonces Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: Una cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz." (Marcos 10:21)

El joven rico fue en búsqueda de aprobación sobre su vida espiritual y qué sorpresa se llevó al escuchar a Jesús decirle:

#1 No existe nadie bueno con relación a la justicia y   a la santidad de Dios.

#2 De ninguna manera, la ley podrá salvarte, pues eres incapaz de cumplirla en su totalidad.

#3 El amor de Jesús no disminuyó la demanda de Dios sobre la fe y la necesidad de arrepentimiento.

Por consiguiente, la única manera de ser aprobados o justificados por Dios, es a través de Jesucristo.

pastor Gilberto Rufat

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