La Apostasía: Tiempos Peligrosos

la apostasía: TIEMPOS Peligrosos

 Base Bíblica: 2Timoteo 4:1-5

“Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio.”

Introducción

La Biblia advierte que los postreros tiempos serían tiempos peligrosos. Sin embargo, la peligrosidad de los mismos no estribaría en la persecución de los creyentes por causa de su fe, sino en que falsos maestros, apóstoles y profetas, entre otros, estarían dentro de la iglesia. La iglesia, que por sí misma se enfrentaba a una sociedad pluralista y a un sistema religioso sincretista, también tendría que enfrentar las falsas doctrinas y a los falsos dirigentes que de ella emergerían.

“También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita.” (2Tm.3:1-5)

Note que la peligrosidad radicaría además en que estos falsos líderes tendrían apariencia de piedad. La palabra piedad del griego εὐσέβεια “eusebeia”, es una palabra compuesta de “eu” la cual significa bien y “sebomai” que tiene el significado de ser devoto. Por ende, estos falsos líderes mostrarían una actitud en pos de Dios, esto es, parecerían ser bien devotos a Dios, no obstante, no lo serían.

En nuestros días, no hay más que observar a algunos predicadores para darse cuenta que algo anda mal. Tenemos a los comediantes, los aduladores, los motivadores, los llamados liberales, los recolectores de ofrendas y las estaciones repetidoras, entre otros, que lejos de predicar el mensaje tal y como está en la Biblia, lo adornan, lo adulteran, lo redefinen o simplemente cambian la atención hacia otros temas, pues ni de la Biblia predican. Pero, nada de esto es nuevo y no debería sorprendernos.

“Por tanto, he aquí que yo estoy contra los profetas, dice Jehová, que hurtan mis palabras cada uno de su más cercano. Dice Jehová: He aquí que yo estoy contra los profetas que endulzan sus lenguas y dicen: El ha dicho.” (Jeremías 23:30-31)

Mientras los falsos maestros presentan una dieta teológica alta en carbohidratos, distante de la verdad del mensaje de Dios, los verdaderos profetas de Dios predicaban y veían el mensaje de la Palabra de la siguiente manera:

“¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová, y como martillo que quebranta la piedra?” (Jeremías 23:29)

Dios no envió su Palabra para sacudirnos el polvo, sino para convertir y cambiar los corazones rebeldes y endurecidos. El plan de Dios en la teología del Nuevo Pacto, no consiste en entrar al corazón de piedra, sino en cambiarlo (Ezequiel 36:26).

¿Qué es la apostasía?

La Apostasía – ἀφίστημιb la misma es una proviene de una palabra compuesta por “apo” - de y “jistemi” - estar de pie, por consiguiente, representa a todo aquel que se aparta del camino.

         I.    ¿Por qué habrá apostasía?

A. El diablo busca alejar a los hombres de Dios.

“Pero me temo que, así como la serpiente con su astucia engañó a Eva, de alguna manera vuestros pensamientos se hayan extraviado de la sencillez y la pureza que debéis a Cristo.” (2Corintios 11:3)

“Por esto, alegraos, oh cielos, y los que habitáis en ellos. ¡Ay de la tierra y del mar! Porque el diablo ha descendido a vosotros y tiene grande ira, sabiendo que le queda poco tiempo.” (Apocalipsis 12:12)

B. Habrá hombres que profesarán la fe, pero nunca creyeron realmente.

“Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo. Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis: ¡Bienvenido!” (2Juan 9-10)

“Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que no todos son de nosotros.” (1Juan 2:19)

“Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo, enredándose otra vez en ellas son vencidos, su postrer estado viene a ser peor que el primero. Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado. Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: El perro vuelve a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse en el cieno.” (2Pedro 2:20-22)

C. Dios permitirá que aquellos que no creyeron a la verdad, crean en la mentira.

“Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia.” (2Tesalonisenses 2:7-12)

       II.    ¿De dónde saldrán los apóstatas?

A. Los apóstatas son enviados por Satanás.

“Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz.  Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.” (2Corintios 11:13-15)

Note la descripción:

1.      Son falsos apóstoles (v.13)

2.      Son falsos agentes de luz (v.14)

3.      Son falsos ministros de justicia (v.15)

B. Los apóstatas saldrán de dentro de la iglesia.

“Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre. Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño. Y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos. Por tanto, velad, acordándoos que por tres años, de noche y de día, no he cesado de amonestar con lágrimas a cada uno. Y ahora, hermanos, os encomiendo a Dios, y a la palabra de su gracia, que tiene poder para sobreedificaros y daros herencia con todos los santificados.” (Hechos 20:28-32)

1.    Los apóstatas entrarán encubiertamente.

“Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.” (Judas 4)

2.    Los apóstatas se disfrazarán como obreros de Dios.

“Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.” (2Corintios 11:13-15)

      III.    Descripción de los apóstatas (Judas 4)

“Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.” (Judas 4)

A. Carácter – son hombres impíos.

B. Conducta – convierten en libertinaje la gracia de Dios.

C. Creencia – No dicen que niegan a Dios y a Jesucristo, sino a la soberanía de Dios y al Señorío de Jesucristo.

Por ende,:

“Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra.” (Tito 1:16)

      IV.    El mensaje de los apóstatas

A. Tiene su inspiración en el infierno.

“Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios.” (1Timoteo 4:1)

B. Es conforme a los deseos de los hombres.

“Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas.” (2Timoteo 4:3-4)

C. Es uno centrado en los deleites y no en la gloria de Dios.

“traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios.” (2Timoteo 3:4)

       V.    El destino de los apóstatas

A. Pagarán conforme a sus obras.

“Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.” (2Corintios 11:15)

B. Serán duramente condenados.

“¡Ay de ellos! porque han seguido el camino de Caín, y se lanzaron por lucro en el error de Balaam, y perecieron en la contradicción de Coré.” (Judas 11)

      VI.    La actitud de la iglesia frente a la apostasía

A. Debe contender por la fe que le fue dada.

“Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos.” (Judas 3)

B. Debe fundamentarse y crecer sólo en la revelación bíblica.

“Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo.” (Judas20)

C. Debe permanecer en la oración. (Judas 20)

D. Debe vivir y sostenerse en el amor de Dios. (Judas 21)

“conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna.” (Judas 21)

E. Debe descansar en la misericordia de Dios. (Judas 21)

F. Debe afianzarse en la segunda venida de Jesucristo. (Judas 21)

G. Debe buscar convencer a los que dudan, convencer a los que no creen y de otros, tener misericordia.

“A algunos que dudan, convencedlos. A otros salvad, arrebatándolos del fuego; y de otros tened misericordia con temor, aborreciendo aun la ropa contaminada por su carne.” (Judas 22-23)

H. Debe buscar la santidad.

“Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo.” (1Tesalonisenses 5:23)

I. Debe confiar en que será guardada.

“Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra.” (Apocalipsis 3:10)

Conclusión

En ninguna parte de la Escritura, se toma la falsedad como una mera mala interpretación o un pequeño error doctrinal. Por el contrario, aquellos (aunque fuera por un momento) que se desviaron de la verdad fueron duramente corregidos (Gá. 2:14). La proclamación de un evangelio diferente es considerado anatema (Gá. 1:8-9).

Muchos han perdido la seriedad del mensaje y la gran responsabilidad como mensajeros de Dios. De ahí, que uno de los requisitos de los pastores fuese, que fueran aptos para enseñar. Pablo advirtió a Timoteo sobre la apatía y vagancia teológica con estas palabras:

 “No descuides el don que hay en ti, que te fue dado mediante profecía con la imposición de las manos del presbiterio. Ocúpate en estas cosas; permanece en ellas, para que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos. Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren.” (1Timoteo 4:14-16)

Tenemos la responsabilidad de velar, no simplemente de lo que creemos, sino de lo que enseñamos. Aunque es cierto que no lo sabemos todo como deberíamos saberlo, no obstante, somos responsables de lo que sabemos y no debemos cambiarlo. La Biblia advierte contra esto lo siguiente:

“No os dejéis llevar de doctrinas diversas y extrañas; porque buena cosa es afirmar el corazón con la gracia, no con viandas, que nunca aprovecharon a los que se han ocupado de ellas.” (Hebreos 13:9)

Es nuestra responsabilidad evaluar nuestra conducta, así como nuestras creencias a la luz de la Palabra de Dios.

“Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados? Mas espero que conoceréis que nosotros no estamos reprobados. Y oramos a Dios que ninguna cosa mala hagáis; no para que nosotros aparezcamos aprobados, sino para que vosotros hagáis lo bueno, aunque nosotros seamos como reprobados. Porque nada podemos contra la verdad, sino por la verdad.” (2Corintios 13:5-8)

por: Pastor Gilberto Rufat