jueves, 3 de julio de 2014

La palabra de la cruz - 1Corintios 1:18

"Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios." (1 Corintios 1:18)

Lamentablemente, el mensaje de la cruz ha ido desapareciendo de muchos púlpitos, quedando casi  rezagado para el tiempo de la semana santa, una vez al año. De igual manera, ha ocurrido con la enseñanza sobre el cielo o la eternidad, la cual hemos abandonado y parece sólo ser útil para velorios y funerales.

Pablo estaba convencido de que el mensaje más importante era aquel que proclamaba el significado de la obra de Jesucristo en la cruz. En una ocasión, tuve la oportunidad de escuchar a un predicador que había quedado frustrado la primera noche de una campaña evangelística, al no ver los resultados esperados. Mientras meditaba en lo ocurrido, su amigo quien le acompañaba, le preguntó qué le pasaba, a lo cual él respondió que estaba frustrado por su predicación de la noche pasada. Su amigo, muy sincero, le dijo que no podía esperar un resultado diferente, puesto que no había predicado, por lo que no existe mensaje sin cruz y sin Jesucristo.

Mi amado amigo, hermano en Cristo y pastor, sin cruz no hay salvación. No importa si el mensaje parece uno trillado, antiguo y no contextualizado, Dios decidió llamar a los que se salvan, a través del mensaje de la cruz. No esperemos resultados diferentes en nuestro ministerio, si estamos colocando como los hijos de Aarón, Nadab y Abiú,  fuego extraño en nuestros púlpitos (un mensaje diferente).

pastor Gilberto Rufat

miércoles, 2 de julio de 2014

El que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, éste será bienaventurado en lo que hace - Santiago 1:25

"Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace."
(Santiago 1:23-25)


De poco provecho será el leer la Biblia, si no nos acercamos a ella con un corazón dispuesto y ningún efecto tendrá en nuestras vidas, si no hacemos lo que ella demanda.

La perseverancia en la lectura y el estudio diario de la palabra de Dios, así como la perseverancia en la obediencia, serán clave, entre ser un espectador o un hombre bienaventurado por Dios.

Le exhorto y animo a tomar con seriedad el mandato de escudriñar la Biblia. No espere que Dios le hable, si usted primero no lo escucha y no hay mejor manera de escuchar a Dios, que no sea, a través de la Biblia.

Tenga presente, que somos nosotros los que dependemos de él y no lo contrario. Nuestras vidas dependen totalmente de cuán claro entendamos nuestra necesidad de buscar a Dios diariamente y no ocasionalmente.

pastor Gilberto Rufat

martes, 1 de julio de 2014

Amor Inteligente - Filipenses 1:9

"Y esto pido en oración, que vuestro amor abunde aun más y más en ciencia y en todo conocimiento." (Filipenses 1:9)

Pablo no quería que el amor de los creyentes en Filipo, quedase sin el conocimiento de la palabra de Dios, pues Dios nos llama a amar con inteligencia y no con meras emociones. Las mismas son parte de nuestro ser, pero no son la razón a seguir, sino que es la palabra de Dios, nuestro marco de referencia, el punto o lugar de dirección sobre la moral.

Los creyentes somos llamados a amar lo que Dios ama y a aborrecer lo que Dios aborrece, porque el amor no es la aceptación del mal, sino el rechazo y el alejamiento del mismo. Dios no ama lo que aborrece, así como no aborrece lo que ama.

Cuidado con caer en la trampa del diablo, de querer usar el amor como una excusa para cubrir toda especie de pecados, o, ¿es que acaso existe una contradicción entre el amor de Dios y su santidad o justicia.? El amor de Dios no es la base de su justicia, sino su santidad.

pastor Gilberto Rufat

sábado, 28 de junio de 2014

La justicia que es de Dios por la fe - Filipenses 3:9

"y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe." (Filipenses 3:9)

Para Pablo, el evangelio representaba el despojarse de toda arrogancia, la que pudiera presuponer nuestra propia justicia ante Dios. Había llegado a entender, que no existía manera alguna en que los hombres pudiesen ser hallados o alcanzados por Dios, que no fuese a través de la fe, mediante la obra realizada por Cristo Jesús.

La salvación, contraria a lo que algunos creen, descansa exclusivamente en la obra de Jesús. Ningún hombre podrá jamás llegar a ser justo delante de Dios, por cuanto todos pecamos. Por consiguiente, la única manera aceptable ante Dios en que un pecador podrá ser hallado justo, es mediante el pago de la deuda ofrecida por medio de Cristo Jesús.

En el verdadero evangelio no existe espacio para glorias humanas, sino para la gloria de Dios. El espacio disponible está dispuesto para aquellos que con humildad de corazón y en respuesta a la soberana gracia de Dios son llamados a servir.

pastor Gilberto Rufat

jueves, 26 de junio de 2014

Sabios para el bien, e ingenuos para el mal - Romanos 16:19



Porque vuestra obediencia ha venido a ser notoria a todos, así que me gozo de vosotros; pero quiero que seáis sabios para el bien, e ingenuos para el mal.” 
(Romanos 16:19)

La obediencia a Dios, sin lugar a dudas, es la mayor evidencia de nuestra fe y de nuestro crecimiento en el Señor, además de ser el mejor abono para su obra. Dios demanda madurez de su pueblo, sin embargo, es lamentable cómo en algunas iglesias escasea el verdadero alimento de la palabra de Dios, mientras que por otra parte, parecen levantarse expertos en el arte de justificar lo que claramente la Biblia llama pecado. En otras palabras, que comienza a levantarse una generación de “creyentes” que es ingenua para el bien, pero sabia en argumentar a favor del mal.

Existe bíblicamente una relación entre nuestro crecimiento en la palabra de Dios y la transformación que ocurre en nuestra vida como creyentes, así como existe una correspondencia entre la alimentación y la salud. Pablo estaba gozoso al escuchar cómo los hermanos en Roma, comenzaban a evidenciar su fe en obediencia. No obstante, no ignoraba el hecho de que enfrentarían dificultades en el camino y que serían retados, cuestionados y perseguidos, por medio de otros sistemas de creencias y filosofías, ya que vivían en Roma, la meca del pluralismo religioso de aquel tiempo.

La única manera segura de garantizar el crecimiento continuo de nuestras iglesias y la perseverancia en la fe de nuestros hermanos, consiste en exhortarles a crecer y a madurar en la palabra de Dios, pues en la medida en que sus creencias son transformadas en convicciones, será más difícil que algo o alguien los pueda sacar de la verdad.  No se alimente con migajas cuando puede y tiene acceso a comer de la mesa de Papá. Estudie diariamente su Biblia y pídale al Espíritu Santo de Dios que le ilumine, a modo de poder discernir su palabra.

pastor Gilberto Rufat

¿PUEDE UN CREYENTE PERDER SU SALVACIÓN, SEGÚN HEBREOS 6:4 AL 6?

  ¿PUEDE UN CREYENTE PERDER SU SALVACIÓN, SEGÚN HEBREOS 6:4 AL 6?    Base bíblica: Hebreos 6:4-6   “Porque es imposible que los que un...